sábado, 17 de mayo de 2014

ELECCIONES EUROPEAS

     El próximo domingo veinticinco de mayo los ciudadanos españoles eligen a los miembros de los distintos grupos políticos que les representarán en el Parlamento Europeo y creo que, en el actual estado de las cosas, no serán unos comicios muy participativos.

     En sus orígenes sí parecía que los gobernantes de la Unión Europea tenían la sana intención de que Europa fuese un lugar para la libertad y el libre tránsito de personas, servicios y capitales, en el que los paíse más ricos, los del norte, ayudasen al desarrollo de esos otros menos poderos, los del sur, entre los que nos encontramos nosotros, aplicando eso tan usado de la solidaridad, con el objetivo de llegar a conseguir la unión económica y política; es decir, hacer un país grande de otros pequeños. O eso, al menos, me parecía a mí. Pero ya veo que no. El final de la dictadura trajo a nuestros abuelos la ilusión por el cambio y por superar la pobreza de un país atrasado y los políticos de entonces, con buen criterio, nos metieron en la Comunidad Económica Europea como si eso fuera el eden. El problema es que, a cambio de subvenciones y de dinero fácil para hacer carreteras, aeropuertos y muchas otras obras que eran necesarias  en aquel entonces, nos dejaron sin agricultura, sin ganadería, sin industria, y ahora somos improductivos y un país de servicios donde los señoritos del norte vienen a relajarse. Nuestros políticos nos han dejado sin personalidad y sin soberanía.

     Y ahora ¿qué?. Ya estamos en el engranaje y es imposible salirse, a no ser de forma violenta y sin sentido. Tenemos que seguir las reglas del juego e ir a votar para ver si, desde otras políticas económicas, podemos conseguir que países  tan poderosos como Alemania dejen de imponernos sus reglas y sus condiciones tan duras  e intentar recuperar parte de nuestra soberanía nacional.

     Pero, ¿a quién votamos?, si estamos hartos de que nos engañen y nos tomen el pelo. Pues creo que a quienes no apoyen los recortes tan tremendos que estamos sufriendo, a quienes defiendan los servicios públicos, a quienes defiendan el reparto de la riqueza para que paguen más los que más tengan, a quienes pongan freno a los bancos y a la corrupción. Y eso creo que lo hacen los partidos de izquierda. El problema es que la izquierda está muy dividida y, si no se unen varios partidos en el Parlamento Europeo, lo veo mal. 

     El día anterior hay futbol  y, aunque muchas personas se pondrán muy contentas si gana su equipo o se entristecerán si pierde porque les apasiona el futbol, creo que,preferirán quedarse en sus casas a ver el partido antes que ir a votar, yo no haría si estuviese en edad para ello. Creo que es una irresponsabilidad, que a algunos les va a venir bien y que después no me podré quejar: tendré lo que me merezco.